Cómo preparar la mochila para hacer el Camino de Santiago

Una de las cosas que más preocupa a los peregrinos a la hora de decidir recorrer el Camino de Santiago es cómo preparar la mochila para llevar todo lo necesario y a la vez no ir demasiado cargados.

Como en ALBERGUES DEL CAMINO queremos hacer todo que esté en nuestras manos para que disfrutéis de esta increíble experiencia lo máximo posible vamos a daros algunos consejos que te ayudarán a preparar la mochila para hacer el Camino de Santiago de manera eficaz. ¡Toma nota!

La ropa para hacer el Camino

A la hora de elegir la ropa que vamos a llevar tenemos que tener en cuenta en qué época del año vamos a hacer el Camino. No necesitarás la misma ropa en verano que en invierno.

Pongamos que vas a hacer el Camino de Santiago entre los meses de mayo y octubre.

Durante estos meses no suele hacer mucho frío por lo que desde ALBERGUES DEL CAMINO te aconsejamos llevar dos camisetas técnicas. Una más fina para los días de calor y otra más gruesa para las noches o días más fríos. Junto a ellas, una capa exterior tipo neopreno. Es ligera, abriga lo justo y es cómoda para las noches.

En cuanto a las piernas, un pantalón desmontable de senderismo puede ser la mejor opción.

Y por su puesto, lleva la ropa justa A y B. Un día te pones A y al día siguiente B. No hace falta más. La mayoría de albergues cuentan con lavadora y secadora en las que podrás lavar tu ropa y tenerla lista de un día para otro.

Calzado

Es fundamental llevar unas botas cómodas de montaña que ya estén adaptadas a tu pie y con las que te sientas realmente cómodo. Es muy importante, que antes de salir a hacer el Camino las utilices para salir a caminar, por lo menos durante dos semanas.

También te aconsejo llevar unas chanclas en la mochila. Las sandalias con velcro pueden se la mejor opción, ya que te permiten ducharte con ellas y además caminar cómodo y aireado si el calor aprieta o te salen ampollas con las botas.

Protección solar

Además, es muy importante que te protejas del sol durante el Camino. Para ello, no olvides llevar una buena protección solar, una gorra y gafas de sol.

Agua

No te lances a hacer el camino sin agua. Te aconsejamos que lleves una botella de un 1 litro de capacidad. No es necesario más. Durante el recorrido encontrarás fuentes en las que podrás rellenarla.

Es habitual ver en el Camino peregrinos noveles con demasiado peso en la mochila, lo que a la larga les acaba pasando factura. Siguiendo estos sencillos consejos viajarás ligero y disfrutarás más de la experiencia ¡Prepara tu mochila con cabeza y disfruta de la experiencia! ¡Buen Camino!

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